miércoles, 22 de febrero de 2012

Hilo Dental

Hilo Dental 
pieza de arte de performance de Lechedevirgen Trimegisto



el día 14 de febrero en el marco de los eventos programados.

DESCRIPCIÓN DE LA PIEZA :

HILO DENTAL

La pieza consiste en la apropiación de los discursos higienisistas del SXX, dónde se pretendía la “limpieza” extrema del cuerpo como único acceso a la purificación del alma (ascetismo) o como única vía de legitimación, siendo indispensable el aseo (físico-mental) de las personas, para el correcto funcionamiento de las sociedades modernas y contemporáneas, causando sufrimiento y represión en los sujetos controlados a distancia, tomando potestad de sus cuerpos y las formas de desarrollarse sexual y socialmente (Biopoder Teledirigido). 

La acción comienza con el performer lavándose los dientes, de manera progresiva, al rededor de cinco veces seguidas, posteriormente utiliza enjuague bucal, y por ultimo mentitas para el mal aliento, y un chicle que tinta su lengua de color azul; lo hace tomando agua de una pecera enfrente suyo, a dónde regresa los líquidos escupiéndolos y volviéndolos a beber, de manera continua, sin parar. 
Posteriormente toma dos destapacaños, bombas para escusado, y con la ayuda de dos condones y lubricante, los inserta en su ano, entrando lo más posible y limpiando con ellos su esfínter, dejándolos llenos de excremento. 
Por último, se sienta y con la ayuda de una aguja quirúrgica y antiséptico, atraviesa sus mejillas, con hilo transparente, que utilizará para estirar la piel de extremo a extremo, halando los hilos que atraviesan la piel. 

Las repeticiones progresivas al lavas los dientes refieren al comportamiento humano implantado por discursos somatopolíticos, de control corporal, que implantan una obsesión por la limpieza de los cuerpos, tomando la boca como principal fuente de microorganismos en el cuerpo, así como por su carácter oratorio de herramienta legitimada para empoderarse públicamente "el uso de la palabra que sólo le corresponde al hombre en sociedad" y su relación implícita con la sexualidad, como extensión de los órganos sexuales, más allá de una genitocracia heterocentrada. 

El uso de los destapacaños, como herramienta de uso cotidiano para limpiar escusados, es reapropiado desde la queer praxis, cómo un objeto que si bien es destinado a la limpieza, aquí se convierte en dildo, y conserva su capacidad de limpiar, quitar, destapar, traspolado al territorio político y simbólico del cuerpo, denotando al ano como lugar sucio, no legitimado por el estado, productor de excrecencias; ahora la labor de limpieza genera placer anal. 

Por último la intervención en el rostro del performer, viene dado a raíz de la interrelación que guarda los métodos de limpieza, la endodonsía, y en general la medicina, con los aparatos de tortura y de mutilación inquisitivos e higienisistas. Al perforar la piel de las mejillas con hilo transparente (hilo dental), y halar de cada lado, se genera una imagen que representa a nivel semiótico los estragos causados por la higiene, la sanitización del sexo, y el discurso de purificación heteropatriarcal falologocentrista, que busca el control de nuestros actos, a través de la esterilización de los sujetos y la continua intervención sobre nuestros cuerpos, siempre considerados sucios, impuros, primitivos, a la pronta necesidad de ser domesticados, educados y pausterizados. 

El uso del hilo dental como prótesis de toda “Sana Higiene bucal” aquí funciona como una metáfora de la opresión y encarcelamiento de los individuos en categorías mutilantes e irrefutables, denotando la necesidad de cobrar conciencia sobre estos aparatos de control, el uso del destapacaños como dildo implica la inquietud de génerar tecnologías (dildotécnia contrasexual) que nos permitan ejercer un empoderamiento desde el cuerpo, como prácticas de la construcción de las identidades y las post-identidades (cuerpos parlantes, cyborgs, identidades trans, etc); una queer praxis que entrelaza el arte y la política. El dolor como parte del discurso de extrema limpieza, funciona como trampolín conceptual al imaginario colectivo de la tortura y las modificaciones corporales, el abrir la boca através de dos hilos transparentes, reconfiguran el uso del hilo del dental, como herramienta de resistencia y de transformación corporal.

La pieza también descansa en el Epifenómeno, proceso señalado y acuñado por Juan Jose Gurrola;  debido a sus características metalingüisticas que no participan de lo verbal, apuesta a la transferencia de un código encriptado* que será compartido por los presentes a la acción; cómo correlato de las prácticas y modos de producción cotidianos que se distinguen en ella.




"El artista de performance, a través del epifenómeno, tiene la oportunidad de descifrar en un lenguaje no racional, parte de la verdad Universal, que se encuentra protegida en códigos. La expone a través de una acción y quienes lo presencian, tendrán la oportunidad de descifrar el contenido que le fue revelado arbitrariamente." * Rocío Boliver, Congelada de Uva.




































Fotografía por Sebastián Salamanca & HacHe 












VIDEO y capturas de pantalla por: Vitamina Studio