Tran$ Acción

Tran$-Acción


ACCIÓN 2 
Tran$ Acción
Pieza de arte de performance 


Descripción:
La siguiente pieza de arte acción presenta la resultante de una ecuación de género. La amalgama entre tópicos referentes a las políticas del cuerpo y la utilización del espacio público como el Transfeminismo, el Capitalismo Gore y el Contrasexualismo, se coagula en  “Tran$ Acción” como una apología a la libertad y como crítica al heterocentrismo que ha institucionalizado las relaciones de poder correspondientes para habitar nuestros cuerpos desde que nacemos. Los dispositivos de control y regulación sexual son implantados a base de relaciones de compra-venta, de transacciones; estas relaciones se caracterizan por su violento modo de operar sobre nosotros, a partir de la culpa y miedo (al rechazo social, al señalamiento médico y clínico, a la muerte incluso) el estado logra controlar nuestros cuerpos, y apresar nuestros sexos. 


El Transfeminismo surge de la veta más agresiva y rabiosa del feminismo, movimiento disidente que comprende el binarismo de género como una construcción cultural creada para el fácil manejo de las personas, premiándolas por  acatar de las reglas, y castigándolas por su desobediencia. La categoría de “mujer” queda corta para el transfeminismo, que comprende dentro de él a todo tipo de “denominaciones“ en cuanto al género y las prácticas sexuales: bollera, transgénero, trasvesties, maricones, superfem, fembuch, putas, etc. Esto quebranta la solides de las estructuras heteronormativas y de las sociedades falocéntricas postindustriales, ya que están establecidas a través del control que otorga el hecho de clasificar a todos en dos grandes únicos grupos, basados en la actividad sexual como un bien, ya para la reproducción, ya para el placer, causando mutilaciones y estereotipos sexuales;  que combate a mas no poder lo ambiguo, lo inclasificable, lo indefinido, lo alterno y lo “diferente”, lo queer (lo raro); pues es ello lo que significa una interferencia, un intersticio, una grieta en el sistema. 


El Capitalismo Gore, visión sobre el paraje económico-social actual, acuñado y desarrollado por  Sayak Valencia, muestra una cruenta y feroz interpretación de la realidad, donde se hacen visibles los procesos altamente violentos por medio de los cuales se crea un entramado socio-político específico de control, que esta en función del movimiento del capital y del valor de los individuos como unidades alienadas sin criterio, que consumen los productos mediáticos (incluyendo el sexo y sus representaciones) sin reflexionar sobre ello. Cómo lo menciona en 13 puntos fundamentales sobre el Capitalismo Gore y el transfeminismo : “El ejercicio de la violencia física, simbólica y medial es una trasversal que vertebra la forma de entender el mundo contemporáneo y crea un mercado al alza que genera plusvalor” 



Los sujetos endriagados como los denomina Sayak, son aquellos quienes son considerados para el sistema como mercancía, y los que a su vez convierten el espacio público en mercados, sitios de canje donde se convence a las personas de que sólo existe una vía de intercambio, y sólo un tipo lineal de mercancía, excluyendo (con la ilusión de libertad de elección, de que ponen al alcance de todos, todas las alternativas existentes) las demás formas de entender el mundo, y la sexualidad, llamándolas sexualidades periféricas o marginales y convirtiéndolas en padecimientos, desacreditando la voz de quienes las practican. “Frente a la voracidad del Capitalismo Gore y sus sujetos endriagos (heteropatriacales, y machistas) es necesario trazar resistencias no distópicas desde el transfeminismo/ los feminismos, los movimientos de disidencias sexuales y los devenires minoritarios que nos han mostrado históricamente su capacidad de agenciamientos novedosos para crear sujetos que no se emparenten con la violencia, ni como víctimas ni como ejecutores de ella.”